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Nuevo mercado Pino Suárez: ahora o nunca

Columna Sin Remitente/

Víctor Ulín/

El alcalde de Centro, Gerardo Gaudiano Rovirosa, ha ofrecido las garantías y la certidumbre a los locatarios de respetar sus espacios en el nuevo mercado Pino Suárez.

Ha planteado, además, que existe la voluntad y disposición para escuchar propuestas o inquietudes de los locatarios por si hay la necesidad de hacer algunos cambios al proyecto de la obra que está programada para concluirse en casi dos años.

“Creo que hay información de más, hay zozobra y puede haber hasta temor de la gente de que si se les mueve entonces ya no van a regresar; no, eso es totalmente falso, si se da la reubicación se tiene que hacer conforme a derecho, se les tiene que garantizar, y en eso yo me pongo al frente para ayudar a los locatarios, de que si se les mueve de manera temporal por un año o el tiempo que sea, todos los que estén en el mercado temporal regresarán al nuevo mercado Pino Suárez”, expresó el edil.

Los locatarios, pues, no tienen más motivos para seguirse resistiéndose a ser alojados en un predio provisional, tentativamente en Casa Blanca, u oponerse al nuevo mercado.

Tanto el gobierno estatal como el municipal ofrecieron ya las condiciones a los locatarios para que se sientan seguros de que su patrimonio será respetado y mejorado.

Los 300 millones de pesos para la construcción del inmueble ya están autorizados por la Federación, y los primeros 150 disponible para iniciar, según las mismas autoridades, en el mes de septiembre.

Que los locatarios del mercado José María Pino Suárez adeuden varios impuestos o carezcan de documentos que acrediten sus espacios, no es suficiente para oponerse a que la obra sea puesta en marcha de acuerdo con lo estimado, mucho menos cuando las autoridades han expresado su disposición para resolver esos inconvenientes.

En vez de buscar trabas, los locatarios deberían proponer que les den facilidades para pagar sus deudas y seguramente las autoridades buscarán la solución a esta demanda.  Los locatarios no tienen ya ninguna razón para especular que perderán sus locales.

Lo que sí puede perderse, si continúan con su cerrazón, son los 300 millones para el nuevo mercado: porque si ese dinero no es usado, entonces la Federación exigirá su devolución

 

 

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